Se trata de un pequeño puente ferroviario cuyo curioso nombre llama la atención de todos los visitantes de la zona. La línea de tren en cuestión a la que pertenecía este puente discurría entre la mina de Ojos Nergos (Teruel) y Sagunto. Estaba explotada por la Compañía Minera de Sierra Menera, la cual se encargó también de la puesta en marcha de este ferrocarril, y llegaba hasta el puerto de Sagunto, donde distribuía las materias primas.
Consta de un solo arco construido con bloques de piedra bajo el que discurre el camino senderista aprovechando así la excavación en el terreno. Las paredes verticales están cubiertas de una malla metálica para evitar el desprendimiento de materiales de las paredes y cuenta con muros de piedra en las zonas más próximas y debajo del puente.