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El ministro inaugura la feria internacional del sector cárnico Meat Attraction para promocionar los productos españoles y destaca que España cuenta con uno de los patrimonios ganaderos más ricos de Europa
Planas señala la necesidad de que la Comisión Europea articule medidas excepcionales para hacer frente a la situación excepcional que vivimos en estos momentos
Asegura que la innovación y las nuevas tecnologías son elementos clave para el futuro del sector ganadero, así como propiciar el conocimiento sobre la diversidad de nuestros modelos productivos
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha subrayado que España cuenta con una potente industria cárnica, que se sustenta sobre una producción ganadera puntera y sostenible. El rico y diverso patrimonio ganadero es la base para el desarrollo de una industria cárnica que, con una cifra de negocio de casi 32.000 millones de euros, ocupa el primer lugar de toda la industria española de alimentos y bebidas, y supone el 24 % del valor de producción de esta industria. El sector cuenta con alrededor de 3.500 empresas, emplea a casi 111.000 personas y está diseminado por toda la geografía española, especialmente en zonas rurales, donde se asientan pequeñas y medianas empresas y también importantes grupos empresariales, algunos de ellos líderes a escala europea. Planas ha destacado el valor de las exportaciones de productos cárnicos que, con 10.250 millones de euros en el año 2021, supone el 18 % del valor de las exportaciones agroalimentarias españolas. Para el ministro, estos buenos datos “tienen mucho que ver con la capacidad del sector de producir calidad, fundamental para ampliar mercados y mantener ese liderazgo”. El ministro ha participado hoy en la inauguración de la feria internacional del sector cárnico Meat Attraction para promocionar los productos españoles, que organiza IFEMA-Madrid y la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (ANICE) hasta el 10 de marzo. En su intervención, ha señalado que estamos en un momento complejo para nuestro sistema alimentario, como consecuencia de la salida de la crisis derivada de la COVID-19, de los efectos de la sequía y de la invasión de Ucrania por Rusia. En este contexto, ha explicado que la Unión Europea está articulando todas las respuestas posibles para hacer frente a los incrementos del precio de la energía y de los costes de producción, como es el caso de la alimentación animal. En este contexto, ha recordado que España y la Presidencia francesa han planteado una serie de iniciativas para que la Comisión Europea “haga frente a una situación excepcional con medidas necesariamente excepcionales”, como puede ser la búsqueda de otros mercados para el abastecimiento de las materias primas. También se ha referido a la necesidad de aumentar la capacidad productiva de la UE, particularmente de maíz, que pueda atenuar la ausencia de importaciones desde la zona de conflicto. En todo caso, ha asegurado que “nuestro abastecimiento alimentario está garantizado”, aunque debemos seguir trabajando para “mantener y desarrollar nuestra autonomía alimentaria ante este nuevo reto”. Por otra parte, ha expresado la necesidad de trabajar para incrementar la renta de los productores primarios, ya que de ello depende buena parte de nuestro medio rural. “Tenemos un gran sector ganadero, una gran industria y una gran distribución, pero debemos conseguir que los márgenes de rentabilidad se recuperen”. A este respecto, ha apuntado que la reforma de la Ley de la Cadena Alimentaria es un instrumento fundamental para lograr un reparto más equilibrado de los beneficios. Asimismo, la innovación y la incorporación de las nuevas tecnologías “suponen elementos clave para el futuro de nuestro sector”, así como propiciar el conocimiento por parte de la sociedad sobre la diversidad de nuestros modelos productivos. Para el ministro es muy importante que “el conjunto de la sociedad tenga conocimiento de cómo se producen nuestros alimentos y el esfuerzo que hay detrás”, desde el punto de vista económico, social y medioambiental. España cuenta con uno de los patrimonios ganaderos más ricos de Europa, con 165 razas autóctonas, de las que 25 están clasificadas de fomento y 140 en peligro de extinción. Planas ha indicado la importancia del consumo de carne en una dieta equilibrada, aunque respetando todas las opciones alimentarias de una sociedad libre, y ha puesto en valor su calidad, variedad y seguridad, que “nos da una producción de la que el Gobierno de España y este ministro se sienten muy orgullosos”. Muchas de estas producciones están amparadas bajo las figuras de calidad diferenciada, como las Denominación de Origen Protegida (DOP) e Indicación Geográfica Protegida (IGP). Desde el ministerio se apuesta además por el desarrollo de la ganadería y profesional a través del sello 100 % Raza Autóctona, al que ya están adheridas 64 razas.
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