Esta etapa conecta los paisajes geológicos del Parque Natural Urkiola, de impresionantes crestones calizos alineados en la sierra de Aramotz, con el imponente macizo del Gorbea. En este último se mezclan elementos de origen kárstico, como el macizo de Itxina, con paredones verticales y formaciones superficiales de lapiaz, y otros elementos de naturaleza silícea, como el monte Gorbea, de formas redondeadas.
La ruta se inicia tras cruzar la carretera que une Bilbao y Vitoria, siguiendo de frente por un camino en dirección oeste. Atravesando entre las edificaciones que conforman el núcleo de Urkiola, el camino se dirige, tras unos 400 m al centro de información del Parque Natural Urkiola -Toki Alai, de recomendada visita. Se sigue la Senda tomando a la derecha un desvío situado algunas decenas de metros antes del centro de información, por una pista de hormigón que asciende 200 m de desnivel a lo largo de unos dos kilómetros.
La ruta va recorriendo la divisoria de aguas, entre bosques de pino silvestre (Pinus sylvestris) y hayas (Fagus sylvatica), hasta llegar a una zona de pastizales de montaña, en el alto del monte Saibi. Durante la subida se pueden contemplar magníficas vistas hacia el Norte del valle de Mañaria, el pico Aitz Txiki a la derecha y el pico Kanpantorreta a la izquierda, y la sierra de Aramotz y el pico Mugarra al fondo.
Desde lo alto del monte Saibi se divisa al fondo el macizo del Gorbea, destino de esta etapa. Desde este punto, la senda desciende en línea de máxima pendiente, con fuerte inclinación, hacia el puerto de Dima, situado a unos tres kilómetros de marcha. La ruta parte hacia la izquierda en una curva cerrada del camino, por un sendero entre pastizales, cruzando más abajo un pinar de pino silvestre. Se toma, a continuación, una pista forestal a mano izquierda que atraviesa un pequeño hayedo denominado Dantzaleku, por ser lugar donde realizaban danzas espirituales los seres mitológicos de la zona, tal y como cuenta la leyenda. La ruta continúa por pistas forestales entre plantaciones de coníferas hasta llegar al puerto de Dima. En este último tramo se pasa junto a un caserío y sus “seles”. En el puerto de Dima existe una zona de descanso con mesas y barbacoas, donde reponer fuerzas, junto a un amplio llano de pastizales.
Para continuar la ruta hay que cruzar la carretera BI-2543 tomando una pista de grava que arranca con una ligera cuesta, y seguir por ésta durante 4,5 km hasta Barazar. Este tramo discurre por pistas en buen estado y con escasa pendiente, atravesando un continuo forestal de plantaciones de coníferas que crean un agradable ambiente sombrío en días de calor. Barazar es un puerto de carretera, con los servicios propios de estas áreas (restaurante, bar, etc.).
La ruta continúa en dirección al macizo del Gorbea, tras cruzar la carretera N-240 en Barazar, por una carretera estrecha de hormigón sin apenas pendiente que se adentra en el Parque Natural de Gorbea, llegando después de unos tres kilómetros de fácil marcha hasta los humedales de Saldropo y su centro de interpretación. Desde Barazar hasta Saldropo el Camino bordea por el Norte una amplia zona de interés geológico identificada como “llanura de Barazar”. La presencia de algunos depósitos glaciares da lugar a la acumulación de agua que origina la turbera de Saldropo o de Barazar.
Saldropo es uno de los principales puntos de acceso al Parque Natural de Gorbea, dotado con zona de aparcamiento y área de descanso. Se puede visitar el centro de interpretación del humedal, que ayudará a entender la importancia de conservar estos ecosistemas.
La ruta continúa por un camino de grava que, tras cruzar el río Eguna por una pasarela de madera. Comienza entonces un ascenso con pendiente progresivamente más acusada y pistas que se van estrechando y deteriorando poco a poco, a medida que van tomando altura entre plantaciones de coníferas por la ladera del Atxuri.
En el último tramo, al pie de los castros que perfilan la arista del Atxuri, se convierte en un sendero muy quebrado y de gran pendiente que obliga a ayudarse con las manos para poder progresar. Una vez arriba, tras dos kilómetros de ascensión y 300 m de desnivel, se observa más cerca el Gorbea, separado por el valle del río Undebe. El cordal de Atxuri configura un complejo kárstico—Karst de Arralde— considerado de interés geológico.
Se sigue llaneando hacia el Noroeste durante 1,8 km, por una senda que recorre la cresta del Atxuri, entre pastos y afloramientos calizos que conforman lapiaces, y con magníficas vistas al valle. Al llegar a una zona de cabañales de pastores en Altamiñaque, la senda gira a la izquierda y comienza a ascender entre depósitos periglaciares de interés geológico.
En esta zona existen dos ejemplares de tejo (Taxus baccata) declarados como Singulares: el “Tejo de Aginarte” y el “Tejo de Aguinaldo”, que bien merecen un descanso.
Desde este punto restan unos 3,5 km de ascensión moderada que es preciso afrontar con calma. Tras cruzar entre algunas cabañas, la ruta asciende por las faldas del Gorbea, que queda a mano izquierda, y al pie de los crestones calizos del pico Aldamin.
Después de un pequeño paso escarpado se llega a un pequeño rellano de pastizales salpicado de cabañas pastoriles. En este punto se puede tomar un camino, hacia el Sur, para acercarse hasta el refugio Aldamin, situado a unos 300 m de distancia, debiendo regresar posteriormente al mismo punto para proseguir la ruta, que aquí presenta dos alternativas. Por un lado, continuar la ruta principal hacia el Noroeste, con final en Arraba (a un kilómetro de distancia), o seguir la variante de Arraba, descendiendo hacia el Oeste entre el macizo kárstico de Itxina y el de Aldamin, que, enlaza de nuevo con la senda principal, tras 2,8 km., en la etapa nº 4.
Siguiendo hacia el final de la etapa 3, en Arraba, se transita por un tramo escarpado, por el pie de unos bloques calizos, desde donde se pueden contemplar unas magnificas vistas al valle de Arratia y, al fondo, los crestones calizos de Urkiola, origen de la etapa. Inmediatamente se llega a la campa de Arraba, rodeada por afloramientos rocosos del macizo de Itxina, ambos elementos de interés geológico asociados a procesos kársticos. En la campa de Arraba se encuentra el refugio que es final de etapa, en torno al cual se ubica una zona de descanso.
Desde el inicio de la etapa, en Urkiola, hasta Saldropo es posible recorrer perfectamente el trazado en bicicleta, teniendo en cuenta algún tramo que requiere cierta destreza como la bajada desde el monte Saibi. Sin embargo el resto de la etapa, la subida desde Saldropo a Arraba, no es apta para el tránsito con bicicleta, puesto que son senderos muy irregulares y de extrema pendiente que no permiten ni siquiera portar la bici al hombro, como es el caso de la subida por Atxuri.
Los “seles” son figuras de ordenación del territorio, con normas y derechos heredados de cuando antaño representaron parte fundamental de la organización del territorio vasco; si bien no son exclusivos de esta comunidad, ya que aparecen en todo el norte de la Península Ibérica (Galicia, Asturias y Cantabria), documentándose su presencia incluso en Extremadura y Castilla – La Mancha.
Presentan como peculiaridad su morfología circular presentando mojones centricales, en los cuales aparecen grabados estrellas con cuatro, ocho o dieciséis puntas, que indican el número de mojones periféricos que existen.
En la actualidad los seles han perdido toda la importancia de la que gozaron en el pasado. Las primeras referencias escritas a seles guipuzcoanos datan del siglo XII, mientras que en Áraba hay referencias del año 1025.
Sus dimensiones varían dependiendo de si se tratan de seles de verano o de invierno, además varia en función de la provincia o comarca en que se ubiquen. Así, un sel de verano debía de tener la mitad de radio que uno de invierno. El radio en el entorno de la comarca del Alto Deba era de unos 151 metros para seles de invierno. En Araba el radio crecía hasta los 154 metros.
Su figura está directamente relacionada con la ganadería, siendo refugio por lo general de la cabaña bovina, y en menor medida de la porcina. Se estima que en el S. XV cada sel acogía entre una y dos docenas de vacas. En el S. XV fue habitual la roturación de seles por campesinos, obligados a vivir allí por los señores, a fin de cultivar mijo, trigo, verduras, etc. y paliar la escasez de alimentos de la época.
Estos espacios naturales protegidos (Parque Natural de Gorbeia, y Zona Especial de Conservación y Lugar de Importancia Comunitaria Gorbeia) son los de mayor extensión de la Comunidad Autónoma del País Vasco con 20.016 hectáreas repartidas entre Bizkaia y Araba.
Su paisaje es resultado de la combinación de hayedos y robledales, farallones rocosos de calizas, como los de Aldamin, y zonas altas de praderas y matorrales (brezales, espinares, agromales, etc.).
Entre la fauna de estos espacios se encuentran la rana bermeja (Rana temporaria), el tritón alpino (Mesotriton alpestris), la lagartija roquera (Podarcis muralis), el escarabajo rosalía (Rosalia alpina), el gato montés (Felis silvestris), el ciervo europeo (Cervus elaphus), el pico picapinos (Dendrocopos major), el alimoche (Neophron percnopterus), el roquero rojo (Monticola saxatilis), etc.
Entre los servicios con los que cuentan el Parque y el ZEC/LIC se encuentran áreas recreativas equipadas, aparcamientos y centros de información e interpretación como el de la localidad de Areatza (Bizkaia).