Este Camino, que transcurre por las cercanías del pueblo del que toma su nombre, atraviesa un paisaje dominado por la cercana Sierra de Alcubierre, en donde todavía está viva la paciente labor de todos sus antiguos moradores, empeñados en la difícil tarea de cultivar estas áridas tierras.
El recorrido comienza en el pueblo, en la conocida como fuente de Arriba, a la que llegan las aguas procedentes de la cercana fuente Madre, siendo éste el único punto del Camino donde es posible abastecerse de agua, junto al panel informativo en el que se detallan las características más destacadas de la ruta.
Desde este punto parten dos recorridos. El primero, de carácter circular, da acceso al castillo de Castejón de Monegros, y tras continuar bordeando el paraje de La Cordera, regresa en su último tramo hacia la ermita de santa Ana. El segundo itinerario conduce directamente a la fuente Madre.
Partiendo desde la fuente de Arriba, este camino se dirige a través de las calles del pueblo hacia el castillo, una edificación de estilo gótico que data de principios del siglo XIII, situada en un alto al norte del núcleo urbano. Entre sus restos se encuentra la ermita de san Sebastián y san Fabián, junto a un área de descanso que permiten una hermosa panorámica de la zona.
La ruta continúa bordeando el paraje de La Cordera. Gracias a lo elevado de este tramo del Camino existen distintos miradores, como el de san Fabián, que se abren sobre el impresionante paisaje de los Monegros cubierto de sabinas (Juniperus sp.), tomillos (Thymus sp.) y romeros (Rosmarinus officinalis), especies capaces de resistir las altas temperaturas de la zona y los suelos ricos en yesos. La ruta continúa por cerros, llanuras y barrancos hasta comenzar su descenso cuando llega al mirador de san Sebastián. Un privilegiado promontorio desde donde el viajero puede observar el pueblo y castillo de Castejón y la ermita de santa Ana, empequeñecidos ante la inmensidad de la comarca.
El recorrido vuelve a adentrarse en el pueblo, dejando a un lado el polideportivo municipal y el colegio, para continuar posteriormente en dirección sur, atravesando la carretera HU-831, y seguir por un camino sombreado hacia la ermita de santa Ana, patrona de la localidad, situada al final de un promontorio desde el que domina todo el pueblo, donde cada año se celebra una romería en su honor.
Desde la ermita, el Camino continúa por una zona de uso compartido con vehículos a motor delimitada por rollizos de madera, hasta volver al punto de inicio en la fuente de Arriba.
Desde la fuente de Arriba sale un camino exclusivamente peatonal y ciclista que se dirige, entre campos de labor, hacia la fuente Madre, un acueducto subterráneo que abastecía de agua al pueblo de Castejón, cuyo interior puede visitarse, que también cuenta en su entorno con un área de descanso.
La Madre es un acueducto subterráneo de época y construcción desconocidas, aunque se supone que sus orígenes se remontan a la época de colonización árabe, que se encuentra en el centro de tres valles con un trazado que comienza en la hondonada de la Val del Carro, un paraje bastante árido.
Desde el interior de una caseta de reciente construcción se puede acceder a esta canalización, cuya misión consiste desde hace siglos en la recogida y transporte de las aguas de un manantial situado a unos dos kilómetros hasta la fuente de Castejón de Monegros.
Su estado de conservación es muy bueno, puesto que el material constructivo pétreo, el sistema arquitectónico en gran parte de sillería y el uso-mantenimiento por parte de los vecinos así lo han permitido durante generaciones. En la actualidad, aún permanece la fuente y sus aguas se siguen utilizando, pero principalmente para labores agrícolas.
La fortificación aloja en su interior, a día de hoy, la ermita de san Sebastián y san Fabián. Fue construido en el siglo XIII siendo su referencia más antigua del año 1211. Se sitúa sobre un cerro al norte de la villa desde el que se puede ver toda la población de Castejón de Monegros. El castillo es un edificio de claras líneas góticas y aunque fue transformado en ermita, se mantiene casi intacta la fachada y las torres y, cerca del depósito de agua, se observan lo que pudieran ser los restos de una torre vigía.