Túnel ferroviario nº 26 del Camino Natural Vía Verde de la Sierra. Localizado a 385 metros del túnel anterior, tiene una longitud de 35 metros y no está provisto de iluminación artificial, por lo que se recomienda el uso de linterna. Este túnel está excavado en arcillas de diversos colores que son conocidas como las arcillas irisadas del Triásico, o como arcillas abigarradas, debido a la combinación al azar de los colores que presentan en el campo.
Este túnel salva las últimas estribaciones del castellar de Jalifa (cerro situado a mano derecha), que ha obligado al río a dibujar un amplio meandro, conocido como el codo de Villalón.
Antes de iniciarse el codo, el río ha ido depositando sedimentos en el paraje conocido como la Huerta de la Rueda, lugar en el que encontramos un típico cortijo andaluz. En esta fértil llanura, actualmente ocupada por un olivar, antaño se cultivaban cereales, algodón, fresas y frutales.