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Brea de Tajo
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Brea de Tajo es una localidad situada al suroeste de la Comunidad de Madrid en la comarca natural de la Alcarria (en la denominada Alcarria de Chinchón).
Aunque los restos carpetanos y romanos encontrados en el entorno de Brea de Tajo pueden indicar un posible asentamiento en la antigüedad, los primeros registros históricos indican una fundación medieval, con los repoblamientos después de la conquista cristiana. Dependía de la villa de Almoguera (Guadalajara) y de los territorios de la orden de Calatrava hasta adquirir el rango de Villa en 1401 y posteriormente formó parte del marquesado de Móndejar desde 1538.
En 1810 en el ámbito de la guerra de la independencia, tuvo lugar una escaramuza entre las tropas napoleónicas y las de Juan Martín Díez, “El Empecinado”, haciendo huir a los franceses hacia Villarejo de Salvanés.
Entre su patrimonio destaca la iglesia de la Asunción (declarada Bien de Interés Cultural en 1997), de estilo neoclásico, cuyas obras comenzaron en 1763, y que es una ampliación de una antigua iglesia del siglo XVI (se conservan de esta la pila bautismal y la torre). En su interior se pueden encontrar frescos de Ginés de Aguirre y los restos del frontal del órgano más antiguo de la Comunidad de Madrid. También se pueden visitar las ermitas (las dos del siglo XIX) de San Roque (en el casco urbano) y San Isidro (en las afueras, junto al cementerio). Aparte del patrimonio religioso, en Brea de Tajo cabe destacar sus casas-cueva o el museo oleico (un museo etnográfico situado en una antigua almazara) y si el visitante se anima a visitar el término municipal en toda su extensión, por ejemplo, recorriendo la Cañada Real Soriana Oriental, podrá descubrir magníficos ejemplos del patrimonio rural tradicional de las vías pecuarias, en forma de corrales y chozas merineras.
Dentro de su patrimonio natural, destaca sobre todo el monte El Robledal, perfecto ejemplo del bosque mediterráneo que en tiempos debía cubrir gran parte de la comarca.
La localidad basa su economía principalmente en el sector primario (agricultura, ganadería, caza) y terciario (turismo rural), con una industrialización escasa.
Entre sus fiestas hay que señalar las procesiones de San Roque (16 de agosto), San Isidro (15 de mayo) o la Candelaria (2 de febrero), las fiestas patronales de la Virgen del Rosario en octubre y los Mayos (30 de abril) y una particular reunión de motos antiguas que se produce uno de los últimos domingos de octubre.