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Navafría
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Se trata de un pequeño municipio ubicado en la provincia de Segovia, en el entorno de la sierra de Guadarrama, que en la actualidad cuenta con poco más de 300 vecinos. Se trata de un asentamiento que hunde sus raíces en la Edad Media. Su desarrollo y economía siempre han estado ligados a las actividades vinculadas con el campo, como la agricultura, la ganadería y el aprovechamiento del inmenso pinar que se extiende en las proximidades del municipio. En este sentido el río Cega supone un elemento natural imprescindible para esta localidad, pues sus aguas han servido desde sus inicios para abastecer no solo a ganaderos y agricultores, sino también para llevar agua potable hasta las casas de sus habitantes. Además el Cega es también responsable del funcionamiento del conocido como Martinete de Navafría, un ingenio hidráulico que data de mediados del siglo XIX, constituye el único martinete para batir cobre que se conserva en Europa. Su trascendencia ha hecho que sea declarado como Bien de Interés Cultural y convertido en un museo etnográfico. Otro elemento clave del patrimonio de Navafría es su iglesia de San Lorenzo, de origen románico.
No obstante, el principal atractivo turístico de esta localidad se encuentra fundamentalmente en su entorno. En las proximidades de Navafría es posible visitar “El Chorro”, una cascada natural de 20 m de altura que constituye una de las más importantes del entorno montañoso. Asimismo es posible subir hasta El Nevero, uno de los picos más altos de Guadarrama y cuya cima supone un impresionante mirador desde el que es posible divisar la provincia de Segovia y la Comunidad de Madrid. En este sentido, a tan solo dos kilómetros del centro de Navafría se ubica el conocido como Parque Natural El Chorro, un área recreativa que consta de todo tipo de instalaciones que permiten el ocio de los vecinos y visitantes, especialmente durante los meses de verano, ya que cuenta con barbacoas, mesas, parque infantil, restaurante y piscina natural gracias a las aguas del río Cega. Asimismo, los amantes de la naturaleza pueden encontrar en este entorno una ruta senderista que lleva hasta una zona de densos pinares en un paraje conocido como el Pozo Verde, en torno al que existen numerosas leyendas sobre amantes trágicos y fantasmas que pueblan la zona.
En cuanto a las festividades del municipio, la más llamativa es la dedicada a San Sebastián, que se celebra cada 20 de enero desde el siglo XIII.