Resumen: En el primer tercio del siglo XX surgen en Canarias los sindicatos agrícolas, adquiriendo notable implantación en las islas y comarcas donde predomina la agricultura de exportación (plátanos y tomates). Estas entidades, formalmente cooperativas, fueron un instrumento de los agricultores locales para controlar la exportación y comercialización de los productos destinados al mercado exterior. Si bien constituyeron un factor de modernización de la agricultura local, por su labor de asesoramiento y ayuda a los asociados, tuvo notoriedad su intento de combatir la influencia de empresas extranjeras productoras o exportadoras, navieros, consignatarios e intermediarios.