Palabras clave: Política hidráulica, mercados de agua, derechos de uso,
externalidades, España
Resumen: La situación de economía madura del agua a la que se enfrentan numerosos países, incluido España, está propiciando la adopción de políticas de demanda para intentar racionalizar su consumo. Entre dichos instrumentos los mercados de agua se perciben como una institución capaz de generar una asignación eficiente del recurso. La Reforma de la Ley de Aguas de 1999 en España incluye en su normativa la posibilidad de realizar contratos de
arrendamiento de derechos de uso del agua. El éxito de dicho desarrollo normativo estará sujeto a las características específicas de la economía del agua del país y, por lo tanto, éstas
condicionarán en gran medida el correcto funcionamiento de los mercados de agua. Este trabajo analiza el caso español, señalando las circunstancias que van a dificultar el correcto funcionamiento de este instrumento económico.