Resumen: Al igual que en otros países, en el sector agroalimentario español existe una relevante penetración del capital exterior de empresas multinacionales. Los autores deducen que las condiciones óptimas para la entrada de estas empresas se produjeron con el rápido incremento de la demanda y los cambios en los hábitos del consumo. Nuestra próxima integración en el área comunitaria constituye un momento óptimo para que las sociedades multinacionales que operan en la CEE penetren en el mercado español (especialmente en los sectores marquistas tradicionales) para ir potenciando la imagen de marca y para ir consiguiendo cuotas de mercado importantes que faciliten la conexión con sus redes de distribución. En relación con el aprovisionamiento de materias primas se destacan dos problemas: la falta de calidad industrial de las materias primas y el continuo crecimiento de sus precios, que está motivando una rápida pérdida de competitividad en los productos elaborados por el sector. Los autores detienen la atención sobre la intervención administrativa en el sector. Al igual que en los países de la CEE, es necesario que las competencias se adscriban a una única Entidad Administrativa, que queda incardinada con el Ministerio de Agricultura.