Resumen: La Desamortización del Trienio Liberal en Andalucía no significó un avance substancial en el desarrollo de unas relaciones de producción capitalistas en el campo. En tanto que reducida a meras transferencias de propiedad, produjo únicamente un cambio en la titularidad de las explotaciones y, al mismo tiempo, la fragmentación de las unidades de renta que constituían las entidades monacales y conventuales. El absentismo fue el principal resultado, dado que al establecer la Deuda Pública corno medio exclusivo de pago, benefició básicamente a los acreedores del Estado, no precisamente los más dedicados a las faenas del campo. La Desamortización no constituyó, estrictamente hablando, una vía de transformación económica, sólo jurídica, que a la larga contribuyó al estancamiento agrario propio de Andalucía. Era el lógico resultado del flujo de recursos; depositados en la deuda, hacia los bienes inmobiliarios buscando más la renta que la productividad.