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Alcachofa

Origen

  • El cultivo de la alcachofa en España está documentado desde el tiempo de los Romanos por el autor español Columela, quien solo cita la reproducción por semilla. Un milenio más tarde, otro compatriota, Ibn-aI-Awam comentaba que en Al Andalus se cultivaba la alcachofa a partir de semilla el primer año, propagándola vegetativamente en años sucesivos. La alcachofa no parece haberse encontrado nunca en crecimiento espontáneo, siendo más bien un resultado de la selección del cardo. La obtención de individuos fácilmente reproducibles por multiplicación de forma vegetativa, habría desarrollado este tipo de multiplicación en períodos más recientes.
  • Origen de la alcachofa según la Universidad Pontificia Católica de Chile

Usos

  • Lo más corriente es consumir de formas muy diferentes la parte más tierna del receptáculo o tálamo floral una vez cocida, pero también puede consumirse la parte tierna de las brácteas después de asar el capítulo completo.

Importancia económica

  • España es el segundo productor mundial de alcachofa con 226.281 t en 2008 según cifras del MARM, por debajo de Italia, con 483.561 t al año. Les siguen, por orden de importancia, Perú, Argentina, Egipto, China, Marruecos, Estados Unidos, Francia y Chile, con producciones sensiblemente inferiores a los dos principales productores.
  • En general, el 60% de la producción se dirige a la industria y el 40% restante para el consumo en fresco, quedando un 75% en el mercado de interior y el restante 25% exportado el resto del mercado comunitario. La producción de alcachofa para exportación se realiza casi exclusivamente en Murcia, empleándose variedades de tamaño grande y color violáceo, características más demandadas en el mercado exterior (predominantemente en Francia).
  • Dentro de nuestro país, este cultivo tiene especial importancia en las comunidades autónomas del litoral mediterráneo, especialmente en Murcia, con más de un 40 % de la producción nacional en el año 2008. También destaca, la Comunidad Valenciana, Tarragona y Navarra, las cuales produjeron el 36% de la producción nacional de la campaña 2008.
  • La producción de alcachofa ha disminuido de forma progresiva y sostenida a lo largo de los últimos 20 años. El descenso más acusado ocurrió a lo largo de la década de los 90 y, tras 10 años de relativa estabilidad ha sufrido otro retroceso en los últimos años. Así la producción total de alcachofa en 2008 (226.281 t) es sensiblemente inferior a la de 1990 (427.900 t) según puede apreciarse en la siguiente figura.
  • Otro aspecto importante a resaltar es la comercialización de las zuecas, de gran importancia en el valle del Ebro. Este comercio es un complemento de la comercialización de los capítulos de alcachofa. La forma tradicional de multiplicar la alcachofa es mediante la plantación de las zuecas. Sin embargo está en auge el uso de variedades multiplicadas por semilla.
  • En cuanto al comercio exterior España es el principal país exportador con más de 10.000 t según datos de la FAO. En cuanto a las importaciones España ocupa el noveno lugar con 220 toneladas importadas en 2008.
  • Anuario de Estadística Agroalimentaria del MARM
  • Portal FAOSTAT de estadística de la FAO (Cultivos)
  • Portal TRADESTAT de estadística de la FAO (Comercio)

Caracteres morfológicos

  • La alcachofa es una planta herbácea, de hojas oblongas, aserradas, con los bordes provistos de grandes dientes, de más de un metro de longitud con un nervio central grueso, y con nerviaciones marcadas. A diferencia de las hojas jóvenes, las hojas adultas son muy lobuladas apreciándose en todas ellas, abundancia de pelos en el envés.
  • Los tallos son acanalados, gruesos, ramificados y con surcos longitudinales. Los tallos finalizan en inflorescencias, que son el objeto del cultivo de la alcachofa.
  • Las flores están insertas en un tálamo terminal carnoso, cubierto por brácteas imbricadas entre si. En muchas variedades dichas brácteas son espinosas.
  • Fruto en aquenio, de forma oblonga, de colores más o menos grisáceos, con manchas pardas o negruzcas.
  • Sus semillas son deprimidas, de color grisáceo, con rayas más oscuras; tienen gran poder de difusión, gracias al cual son trasladadas a grandes distancias por el viento; esto tiene el inconveniente de que luego dan lugar a plantas silvestres que no se parecen en nada a las de origen, ya que son plantas degeneradas y de peor calidad.
  • La facultad germinativa dura de seis a doce años, tardando en germinar unos veintidós días. El número de semillas contenidas en un gramo es de 27, aproximadamente.
  • La raíz puede alcanzar profundidades mayores de 50 centímetros, extendiéndose a lo ancho de forma similar a la parte aérea, formando conos de hasta 70-90 cm de diámetro en su parte alta. Superficialmente llega a formar un rizoma a partir del que brotan yemas auxiliares de hojas antiguas que pueden producir esquejes. Parte de dicho rizoma puede usarse en multiplicación vegetativa en lo que se conoce como zuecas o palos.

Requerimientos de cultivo

  • Necesita para su desarrollo tierras bien drenadas, profundas y muy fértiles; las que mejor van son las de textura arcillo-arenosa, incrementándose su cultivo en zonas de nuevos regadíos y terrenos más sueltos (areno-limosos), más pobres en elementos fertilizantes. El suelo ha de ser rico en materia orgánica y elementos minerales.
  • Es conveniente que este cultivo se implante en regiones o zonas donde la diferencia de temperatura entre el invierno y el verano sea apreciable, ya que la planta sufre en los meses de mucho frío una detención que luego repercute en un mayor desarrollo, vigor y actividad al llegar la primavera; produciendo más y mayores inflorescencias si la vernalización ha sido correcta.
  • Es una planta de climas suaves o cálidos, que no sean excesivamente húmedos, en que las bajas temperaturas y el excesivo calor interrumpen su desarrollo. Si desciende la temperatura en invierno a menos de 5 grados centígrados, se detiene el desarrollo. La sensibilidad ante bajas temperaturas depende del órgano de que se trate y del momento del ciclo en que se encuentre la alcachofa. Los capítulos son destruidos con temperaturas entre -2 y -4ºC, dependiendo de la variedad y del estadio de desarrollo. En invierno la alcachofa puede llegar a soportar temperaturas entre -10 y -15ºC dependiendo de la variedad, el estado del suelo y del agostamiento de la vegetación.
  • El alcachofal es muy exigente en agua; cuando falta ésta se obtienen capítulos más pequeños, de menos resistencia al transporte, y se adelanta la fructificación; por el contrario, con riegos copiosos los capítulos son más jugosos, de mayor tamaño y resistentes al transporte.
  • Fuente: Fundación Ruralcaja, 2010.

Técnicas de cultivo

  • La alcachofa se reproduce normalmente por vía vegetativa mediante zuecas o palos. Las zuecas, estacas o palos son la parte basal de brotes que han producido capítulos y que se utilizan para plantación tras una desecación previa de la planta madre. Suelen llevar adheridas la parte del rizoma sobre la que esos brotes van insertos así como algunas raíces.
  • Zuecas y palos de distinto calibre y con diferente grado de diferenciación de las yemas de su base.
  • También se comercializa alcachofa procedente de semilla. Su uso tiene la ventaja de su menor coste de plantación, una mayor homogeneidad del cultivo, la posibilidad de convertirlo en un cultivo anual, mayor garantía sanitaria y la posibilidad de la producción estival. La mayoría de las variedades de alcachofa multiplicadas por semilla son híbridos F1. Si no fuera así suelen obtenerse plantas más heterogéneas y de menor calidad.
  • La plantación se suele realizar en verano en marcos que oscilan entre 0,9 - 1,2 m entre líneas a densidades que pueden oscilar entre 12.500 y 15.000 plantas/ha. La duración normal de una plantación es de 2-3 anos, aunque en zonas como Navarra, donde se produce mucha zueca para plantación, son habituales los cultivos anuales. La vida de las plantaciones viene salpicada de períodos de reposo en verano y en zonas más frías por las heladas al principio del invierno. El reposo estival se suprime con la iniciación de los riegos. Otras prácticas culturales son escardas, aporcados, aclareo de rebrotes y eliminación de restos de cultivo durante los períodos de reposo. La alcachofa se cosecha a mano, iniciándose en octubre, siguiendo más o menos intensamente al inicio del invierno, dependiendo del clima de cada zona, y prolongándose hasta Mayo o Junio en las zonas más frías. Con las nuevas variedades de semilla se están consiguiendo producciones estivales.
  • A continuación, y a modo de ejemplo, se incluyen las fechas orientativas para la siembra y la recolección de variedades de semilla:
  • Siembra: De Marzo a Junio en semillero, trasplantar cuando las plantas tengan unos 10 cms.
  • Recolección: De Diciembre a Marzo del año siguiente.
  • En parcelas donde crece hierba espontánea, la planta se desarrolla con vigor, pero las producciones son escasas; este cultivo necesita, entre otras cosas, terrenos limpios y muy cuidados, para lo cual se pueden efectuar los tratamientos necesarios con productos a base de herbicidas bipiridilos, a dosis de 0,4 a 0,6 kilos de materia activa por hectárea, pudiéndose utilizar a lo largo de todo el ciclo vegetativo y poniendo cuidado en no mojar las plantas, ya que se producirían quemaduras.
  • Coste de las operaciones de cultivo

Plagas y enfermedades

Tipos de variedades

  • Sala y Carpintero (1967) subdividían las variedades españolas en dos grupos, a saber: blancas y violetas. Sin embargo en este último grupo predominan variedades extranjeras (Gil Ortega, R., 1999). Por ello se ha optado por clasificar las variedades de alcachofa según su época de recolección en variedades precoces, susceptibles de iniciar la formación de capítulos en otoño, prosiguiéndose en invierno y primavera, variedades tardías, que inician la formación del capítulo al final del invierno, y variedades de media estación, cuya iniciación floral y consecuente formación de capítulos se produce en un periodo intermedio.
  • Variedades precoces
  • Variedades de ciclo medio
  • Variedades tardías

Fuentes

  • Gil Ortega, R. (2001) Alcachofa. En: La Horticultura Española. Nuez, F y G. Llacer (Eds.). Sociedad Española de Ciencias Hortícolas (SECH) y Ediciones de Horticultura, S.L. Págs. 90-92.
  • Gil Ortega, R. (1999) El cultivo de la alcachofa. Variedades de semilla. Hoja Divulgadora 2097 HD. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 47 págs.
  • Gutiérrez López, M. (2003) Producción de alcachofa de semilla en Aragón. En: XXXII Seminario de Técnicos y Especialistas en Horticultura. La Rioja 2002. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Págs. 61-73.
  • Reche Marmol, J. (1971) Cultivo de la alcachofa. Hoja Divulgadora nº 2-71. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 24 págs.
  • Solchaga Catalán, A. (2003) Indicación Geográfica Protegida, Alcachofa de Tudela. Navarra Agraria, 137: 19-24.

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